La Banda Sonora de Sunrise

 

La Banda Sonora de Sunrise

Para esta semana, he elegido una escena famosa de la película altamente notable Sunrise (F.W. Murnau) dado que contiene una combinación fascinante de técnicas fílmicas y música cinematográfica. Para darla contexto, se debe notar que esta escena especifica se trata de una aventura amorosa entre un campesino y una mujer de ciudad. Dentro de esta escena, la mujer pide que el hombre deje su mujer actual para escapar a la ciudad con ella. Sin embargo, ella exige algo más oscuro: quiere que el hombre mate a su mujer a través de ahogarla en el agua. Por esta razón, opino que la música intensa y cromática es muy adecuada dado que es una escena tan melodramática.

Innegablemente, el periodo de la pieza usada viene del siglo veinte dado que la música contiene muchísimo cromatismo y una orquesta sinfónica con una gran variedad de instrumentos. Es más, es un movimiento vivace, con un carácter oscuro y un alto nivel de intensidad. La escena empieza con los intertítulos: “Vende tu granja…ven conmigo a la ciudad,” y al mismo tiempo, suenan las cuerdas altamente cromáticas que tienen un gran crescendo cuando la mujer acerca al hombre.

Es interesante que este sonido extra diegético detenga cuando el hombre pregunta a la mujer de ciudad… “¿Y mi mujer?” Esta elección creativa del director significa que vemos el mundo interior del hombre más claramente, es decir, observamos su remordimiento en cuanto a la idea de dejar su mujer.

Otro momento fascinante es cuando la mujer pregunta al hombre: “¿No podría…ahogarse?” Durante este momento dramático, estas palabras disuelvan literalmente hasta que desparecen, y la música incluye una secuencia descendente cromática. Se puede decir que el director quería que la audiencia se sintiera la intensidad emocional a través de esta música siniestra. De nuevo, podemos ver que esta música viene del siglo veinte dado que el rango de los violines es tan alto.

Hay un cambio cuando la violencia entre la pareja se transforma al romance, es decir, besan en lugar de luchar. Las palabras “Ven a la ciudad” repiten dos veces, y aparecen en caracteres grandes para demostrar la importancia de esta cita. Cuando el director nos introduce a las imágenes artísticas de la ciudad que flotan en el aire, aparecen los sonidos diegéticos de la ciudad, por ejemplo, el bocinazo de los coches y la música jazz. Esta mezcla arrolladora de música tan cromática y sonidos extra diegéticos nos muestra que estamos en el mundo cinematográfico del siglo veinte.

En resumen, creo que el director quería mostrarnos el efecto siniestro de la ciudad a través de la “mujer fatal” y la música desorientadora.

Fuente principal: Sunrise (1927), Famous Scene. - YouTube

 




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